Exterior: discreción con alma de bestia

El RS3 Sedán parte de la base del conocido A3, pero Audi lo transforma radicalmente: suspensiones rebajadas, guardabarros ensanchados, un kit aerodinámico completo y una doble salida de escape que deja claro que no se trata de un sedán común. Las llantas de 19 pulgadas calzan neumáticos Bridgestone Potenza Sport con diferentes medidas en cada eje, optimizando el agarre y el paso por curva.

El diseño mantiene cierta sobriedad, lo que refuerza el contraste entre su apariencia de sedán familiar y su naturaleza deportiva. Solo la parrilla delantera, más grande y en plástico negro, puede generar opiniones divididas en cuanto a estética. Faros Matrix LED con animaciones personalizables y detalles en color Progressive Red completan el conjunto.

Interior: calidad premium y detalles discutibles

El habitáculo mantiene el nivel de refinamiento esperado en un Audi RS: butacas deportivas con excelente sujeción, volante forrado en Alcántara y un tablero digital configurable de 12,3 pulgadas acompañado de una pantalla multimedia de 10,1. Sin embargo, hay detalles que no convencen: la selectora de cambios es demasiado pequeña y los botones táctiles del volante pueden activarse accidentalmente.

La habitabilidad trasera es correcta, aunque limitada por el tamaño de las butacas delanteras, y el baúl se reduce a 321 litros debido al diferencial trasero. No cuenta con rueda de auxilio, solo con un kit de reparación.

Seguridad: equipamiento actualizado y frenos de competición

El RS3 incorpora por primera vez en Argentina un paquete completo de asistencias a la conducción: control de crucero adaptativo, frenado autónomo de emergencia, mantenimiento de carril y alerta de tráfico cruzado trasero. Los frenos son un punto alto, con discos de acero de seis pistones y opción de frenos cerámicos más livianos y resistentes al calor.

Según Euro NCAP, el A3 en el que se basa este modelo obtuvo cinco estrellas, con 89% de protección para adultos y 81% para niños.

Motor y comportamiento: herencia del Quattro y rendimiento explosivo

La gran protagonista es la mecánica. El RS3 mantiene viva la tradición del mítico Audi Quattro con su motor 2.5 TFSI de cinco cilindros en línea, turboalimentado, con 400 CV y 500 Nm. Asociado a una caja S-Tronic de doble embrague y tracción integral Quattro con diferencial trasero "Torque Splitter", el sedán acelera de 0 a 100 km/h en solo 3,8 segundos y alcanza los 280 km/h.

En ciudad se muestra dócil y utilizable a diario, aunque el despeje bajo y los neumáticos de perfil reducido requieren atención en calles en mal estado. El consumo ronda los 12,5 l/100 km en uso urbano, mientras que en ruta puede bajar a 8,5 l/100 km. En modo deportivo, el gasto puede superar los 18 l/100 km.

Conclusión: un sedán compacto con ADN de rally

El Audi RS3 Sedán 2025 redefine lo que se espera de un sedán del Segmento C. Con un comportamiento dinámico sobresaliente, una mecánica con herencia de rally y tecnología de primer nivel, logra combinar confort diario con prestaciones propias de autos mucho más caros. Frente a rivales como el BMW M2 o el Mercedes-AMG A45 S, su propuesta es única: una berlina discreta por fuera, pero feroz por dentro.