17 de diciembre de 2025
La cilindrada es uno de los datos más citados cuando se habla de motores, pero también uno de los menos comprendidos. No es lo mismo que la cantidad de cilindros y no se elige al azar: se calcula con una fórmula concreta que define cuánta mezcla de aire y combustible puede admitir un motor en cada ciclo.
Cuando se habla de motores de combustión interna, hay dos conceptos que suelen confundirse: cantidad de cilindros y cilindrada. Están relacionados, pero representan cosas distintas.
Los cilindros son las "cámaras" donde ocurre la combustión. Dentro de cada uno se mueve un pistón que sube y baja, transformando la explosión de la mezcla aire-combustible en movimiento mecánico.
Hoy, los motores más comunes suelen tener tres o cuatro cilindros, mientras que los de mayores prestaciones pueden tener cinco, seis, ocho o más. Además, esos cilindros pueden disponerse de distintas maneras:
En línea
En V
Planos u opuestos horizontalmente (bóxer)
La disposición influye en el comportamiento, el tamaño y el sonido del motor, pero no define por sí sola la cilindrada.
La cilindrada, también llamada desplazamiento, es el volumen total que desplazan los pistones dentro de los cilindros. En otras palabras, indica cuánta mezcla de aire y combustible puede aspirar el motor en un ciclo completo.
Se expresa normalmente en centímetros cúbicos (cc) o en litros. Por ejemplo, 2.000 cc equivalen a 2,0 litros.
Un dato clave: dos motores pueden tener la misma cantidad de cilindros pero distinta cilindrada, o la misma cilindrada con diferente número de cilindros.
Para calcular la cilindrada de un motor hacen falta cuatro elementos concretos:
Diámetro del cilindro (D)
Carrera o recorrido del pistón (S)
Constante Pi (?)
Cantidad de cilindros del motor
Con esos valores se obtiene primero la cilindrada de un solo cilindro, y luego se multiplica por el total de cilindros.
La cuenta básica es la siguiente:
Otra forma equivalente es calcular primero el radio del cilindro:
Ambas fórmulas dan exactamente el mismo resultado.
El número obtenido representa el volumen de un cilindro. Para llegar a la cilindrada total del motor, ese valor se multiplica por la cantidad de cilindros.
Tomemos como ejemplo el V8 6.2 litros (M159) de Mercedes-Benz. Sus datos técnicos son:
Diámetro del cilindro: 102,2 mm
Carrera del pistón: 94,6 mm
Cantidad de cilindros: 8
El cálculo de la cilindrada unitaria es:
O bien:
El resultado de esa cuenta da el volumen de un cilindro. Luego, ese valor se multiplica por ocho:
Redondeando, se obtiene la cifra comercial conocida: 6,2 litros.
La cilindrada influye directamente en cuánta potencia y torque puede generar un motor, aunque no es el único factor. Tecnología, régimen de giro, sobrealimentación y eficiencia juegan un rol clave.
Por eso hoy existen motores chicos con turbo que rinden como motores grandes de otras épocas, pero el cálculo de la cilindrada sigue siendo el mismo de siempre: pura matemática aplicada a la mecánica.
Entender cómo se obtiene ese número ayuda a leer mejor una ficha técnica y a no quedarse solo con el marketing. Porque detrás de cada "2.0", "1.3" o "6.2" hay una fórmula tan simple como implacable.
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