Diseño exterior

El C3 Aircross presenta un aspecto robusto, con detalles que lo acercan al mundo SUV, como los guardabarros ensanchados y los apliques en plástico gris en los paragolpes. Las llantas de 17" y las líneas agresivas en los laterales le dan un aire más moderno que su predecesor. Sin embargo, los colores disponibles no se destacan por ser muy variados, predominando los tonos grises y un bordó. Un punto a favor: es un vehículo que luce más grande de lo que indican sus números.

Interior y tecnología

Puertas adentro, el C3 Aircross sorprende por su tecnología accesible y fácil de usar. Cuenta con una pantalla multimedia de 10" compatible con Android Auto y Apple CarPlay de forma inalámbrica, permitiendo manejar funciones sin sacar el celular del bolsillo. También tiene una pantalla de 7" como tablero de instrumentos que, aunque funcional, queda algo básica en comparación con otros modelos.
A nivel espacio, la versión de cinco asientos se destaca por su habitabilidad. Las plazas traseras son amplias y el baúl, con 493 litros, es más que suficiente para las necesidades familiares. Eso sí, la rueda de auxilio es temporal y no permite grandes trayectos.

Comportamiento en ruta

El Citroën C3 Aircross no está pensado para la aventura extrema, pero su motor Turbo 200 de origen Fiat con 120 CV y caja CVT responde bien en ciudad y rutas. Su andar es cómodo, y las suspensiones permiten superar los baches porteños sin problemas. Aunque no es un auto deportivo, el turbo le da ese empuje extra para moverse con agilidad, manteniendo un bajo consumo de combustible en ruta.
En cuanto a ruido, a velocidades superiores a 100 km/h no se perciben grandes molestias, lo que mejora la experiencia en viajes largos. Eso sí, el consumo de 9.7 l/100 km en trayectos mixtos deja un sabor agridulce, dado que uno esperaría menos de un motor de estas características.